Las elecciones en la provincia de Neuquén tuvieron un carácter premonitorio en cuanto a las preferencias de los electores, y delinearon las chances del presidente Mauricio Macri para su reelección.
De hecho, se advirtió que estas elecciones no serían un buen comienzo electoral para el principal mandatario. Ello se debe a que el Movimiento Popular Neuquino (MPN) es un partido que viene gobernando la provincia desde hace 60 años, y la historia no cambió.
Asimismo, en Olivos, Mauricio Macri, junto con su cuerpo íntimo de mandatarios y asesores, diseñó su campaña electoral y reconoce que el silencio de la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner beneficia sus chances en las elecciones presidenciales. No obstante, es consciente de que padecerá derrotas en distritos que no puede controlar.
El presidente se mostró satisfecho de que Omar Gutiérrez, actual gobernador de Neuquén y candidato a la reelección en ese cargo, derrotará a Ramón Rioseco, el candidato de Cristina en los comicios que se desarrollaron en la provincia.
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Candidato de Mauricio Macri en Neuquén reconoció la derrota
Macri ya mostraba resignación, hizo el duelo de Horacio “Pechi” Quiroga, el actual intendente de la ciudad de Neuquén. Este suceso lo demuestra el hecho de que nadie de la Casa Rosada viajó al lado del candidato para acompañarlo en el cierre de su campaña.
En los últimos sondeos, el intendente se encontraba tercero frente a los demás candidatos y, desde hace un tiempo, se mostró distante con Mauricio Macri. La reelección de Omar Gutiérrez demostró que “Pechi” tenía razón.
Con la derrota de Cambiemos en Neuquén, el presidente se prepara para las próximas elecciones. El peor escenario que contempla es el triunfo de Río Seco. Esa victoria podría afectar la gira de Dujovne por Houston, cuando se refiera a Vaca Muerta, yacimiento localizado en Neuquén, con un gran potencial en relación a la llegada de inversiones, y la suba del dólar por la incertidumbre política.