El tratamiento Venus Legacy no está restringido a ningún grupo etario, aunque sí que se recomienda tomar recaudos en determinados casos. Por eso y otros motivos más es tan importante la consulta previa con un especialista.
Por ejemplo, si la zona a tratar padece alguna infección, inflamación o enfermedad que se activa con el calor, o si se es (o ha sido) paciente de cáncer, habrá que evaluar si el tratamiento puede llevarse a cabo o no, por motivos de seguridad.
Lo mismo ocurre si el paciente tiene implantes metálicos o de silicona en la zona cercana al tratamiento.
También hay que evaluar la posibilidad de realizar el Venus Legacy si el paciente padece enfermedades autoinmunes de la piel.
En institutos de excelencia como Halo Clinic, sus expertos podrán asesorarte en todo lo referente a este tratamiento, y podrán adaptar el mismo de forma tal que, sin importar tu condición, puedas darle a tu cuerpo su aspecto soñado.
¿Cómo funciona Venus Legacy?
El tratamiento de estética facial y corporal Venus Legacy no solo es sumamente efectivo, sino que también es cómodo y nada invasivo, ya que su potencia es regulable y no demanda de ningún período de recuperación posterior.
Además, este tratamiento es apto para todo tipo de pieles, sin importar su tonalidad.
Su principal objetivo es eliminar la celulitis, la flacidez y otros signos de envejecimiento de la piel.
Utilizando radiofrecuencias y campos electromagnéticos, Venus Legacy aplica pulsos de calor controlados por debajo de la superficie de la piel. Esto estimula la formación de fibras tanto de colágeno como de elastina.
Esto, sumado a una succión pulsada, logra estilizar y esculpir el cuerpo.
El tratamiento se lleva a cabo una vez por semana. Sin embargo, la cantidad de sesiones variará dependiendo del paciente, y será el especialista quien indicará cuántas serán necesarias.
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