La Duquesa de Sussex, Meghan Markle, se encuentra en la cuenta regresiva para tener a su primer bebé. Por ello tomó un vuelo a Nueva York el fin de semana pasado para reunirse con sus amigas más cercanas y celebrar así su baby shower.
Este lo organizó Jessica Mulroney, la mejor amiga de la duquesa y organizadora de bodas. El fin de semana estuvieron en Ladurée en Soho, para comprar macarrones, en lo que fue una visita privada, según dijo una fuente a la revista Hello!
En ese sentido, la duquesa ya reveló en el pasado su fascinación por la repostería de lujo con sede en París, a la que considera una pequeña parte de esa ciudad en el corazón de la Gran Manzana. Los días de celebración comenzaron con una salida de dos: Meghan y Abigail Spencer, actriz de Suits.
Las famosas fueron al bar Flora, que se encuentra en el interior del museo Met Breuer, pero tuvieron que irse de allí tan solo 15 minutos después debido al interés de los curiosos en ellas.
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Después la organizadora del baby shower citó al resto de las amistades de Meghan en el hotel Mark donde la esperaron con flores sus grandes amigas Serena Williams, Misha Nonoo y Markus Anderson. Todas llegaron al bar The Polo alrededor de las siete de la tarde y estuvieron riendo y hablando tendido.
Al mismo tiempo, se sumaron a la celebración su vieja amiga Benita Litt; la estrella de Suits Sarah Rafferty, la actriz y cantante india Priyanka Chopra, casada con Nick Jonas en una fabulosa boda en su país natal y la autora y productora de televisión Lindsay Roth.
Para finalizar, la futura mamá estaba radiante y no podía dejar de sonreír, demostrando la ilusión que le hacía poder disfrutar de esta velada tan especial rodeada de amigos. Para la ocasión, la Duquesa lució un total-look negro en el que combinó un abrigo de la diseñadora Victoria Beckham, con unas botas de pelo rasurado y original tacón triangular de Tamara Mellon, y bolso de piel de Stella McCartney.