Las frambuesas son un fruto fino codiciado por muchos, incluídos en postres y tortas de múltiples maneras. Hoy te contamos cómo cultivarlas en casa y contar, cuando quieras, con tu propia provisión de franuis.
¡Comencemos! ¿Qué debo saber si quiero cultivar mis propias frambuesas?
Seguro te estés preguntando cuestiones básicas como ¿necesitan mucho riego? ¿son sensibles a las altas o bajas temperaturas? ¿En qué época del año debo plantarlas? ¿Cuándo están listas para la cosecha? Todo esto y más lo respondemos a continuación.
Estos sabrosos frutos están listos para consumir y usar a finales de la primavera/inicios del verano. Afortunadamente, no requieren de grandes cuidados y suelen proporcionar una gran cosecha.
El frambueso suele adaptarse sin grandes problemas a cualquier tipo de jardín, huerto o, incluso, crecer felizmente en la maceta adecuada. Puede ser cultivado en los más variados lugares, ya que, también, se adapta favorablemente a las diferentes temperaturas.
La planta de frambuesas requiere, durante su crecimiento, de un período de clima frío. Aunque las heladas tardías pueden ser peligrosas y afectar a la floración. Como todo cultivo, no obstante, es importante regular la humedad del suelo y evitar que se genere encharcamiento.
Es aconsejable cultivar este fruto en un suelo rico en materia orgánica, abonado con nutrientes y de ph no alcalino. Esto influirá de forma significativa en la preservación del frambueso.
Debes saber que esta planta suele ingresar en un período de letargo invernal, en este momento casi que puedes olvidarte de ella. De hecho si hay precipitaciones mensuales, podemos asegurarnos de que todo lo necesario está hecho. Caso contrario, con un riego mensual es suficiente.
Pero luego es momento de período de vegetación y nacimiento de los frutos. Aquí si es necesario brindar algunos cuidados extras, como mantener el suelo húmedo y cuidar el cultivo de la exposición excesiva y directa a la luz solar.
Algunos cuidados extras
Es importante cuidar el espacio del cultivo, eliminar las malas hierbas y evitar el crecimiento de raíces adventicias. También, por supuesto, será pertinente preservar tus cultivos de frambuesas ante posibles plagas.
Para evitar daños por la acción del viento podés darle sostén a los tallos con alguna varilla o rama. Y, por otro lado, asegurarte de que no se encuentra algún tipo de hongos creciendo a su alrededor, estos podrían generar enfermedades que afecten negativamente al cultivo.
El frambueso suele requerir de la poda de ramas más viejas y oscuras, que se extienden desde el tallo central. Lo mejor es proceder a cortar una a una, para evitar daños o manipulación violenta del cultivo.
Por último, es aconsejable realizar la recolección durante las primeras horas del día y colocar lo antes posible la cosecha en la sombra o bien llevar a la heladera. Más allá de estos aspectos, en términos generales, el cultivo casero de frambuesas en una huerta ecológica o jardín a pequeña escala es posible y sencillo para quien esté interesado.
¡Te invitamos a seguir leyendo la sección de jardinería para mantenerte actualizado y, especialmente, Los 4 árboles frutales que podés cultivar en maceta para conocer otras opciones que pueden hacer de tu jardín uno muy especial!