Representantes de la Armada argentina, notificaron ante los medios de prensa que ya se dio por finalizada la búsqueda de sobrevivientes del submarino ARA San Juan, desaparecido hace dos semanas atrás.
La nave partió el pasado 13 de noviembre desde el puerto de Ushuaia, al extremo sur de la Patagonia, y su último contacto con la base fue el día miércoles 15 de este mes. En él se localizaban 44 personas, entre ellas Eliana Krawczyk, la primera mujer submarinista de América del Sur.
El día de su desaparición, se manejó una posible emergencia interna debido a un cortocircuito, que pudo generar un incendio en el submarino y el consecuente ingreso de agua en algunos de sus compartimientos.
“No ha sido posible localizar el submarino y no habrá salvamento de personas. Se ha extendido hasta el doble el tiempo de las posibilidades de rescatarlos”, expresó el portavoz de la Armada, Enrique Balbi, agregando que sí continuarán las operaciones para localizar la nave, con ayuda de varios países vecinos como Uruguay, Chile y Estados Unidos.
De esa forma, las autoridades militares revelaron que ya pasaron a una nueva fase de la controversial búsqueda por el ARA San Juan, debido a que algunos piensan que estaría a uno o dos kilómetros por debajo del nivel del mar, lo que ha hecho casi imposible determinar su exacta localización.
Tristemente, ni la mejor o mayor tecnología naval extranjera -abocada al caso- logró marcar una diferencia para encontrarlo, puesto que un sofisticado submarino estadounidense sólo alcanzó a trabajar a 600 metros de profundidad, sin obtener señales.
La operación “rastrilló” -hasta ahora- un área de 557.000 millas náuticas por exploración visual, y 1,49 millones de millas náuticas cuadradas, mediante exploración radar.
Expertos en el tema coincidieron en que sí habrá una indagación a fondo sobre lo ocurrido, con implicaciones políticas, pues se cree que las fallas técnicas del ARA San Juan pudieron evitarse si acaso hubiese un mejor y mayor presupuesto militar, acorde a los requerimientos actuales.
