Este miércoles la Cámara de Diputados hará realidad el proyecto de Responsabilidad Penal Empresarial en forma de ley, sin modificaciones al texto que tuvo media sanción del Senado, y por unaminidad, el pasado 27 de septiembre.
El plan, promovido por el Gobierno y por el cual abogó el mandatario nacional Mauricio Macri en la apertura de ordinarias el 1 de marzo ante la Asamblea Legislativa, incluye en la legislación la penalización de delitos de corrupción de las personas jurídicas (empresas, asociaciones, fundaciones, cooperativas), hasta ahora no alcanzadas como tales, porque el Código Penal refiere a las personas físicas.
En la disputa entre senadores que se llevó casi la mitad del año, la controversía más grande fue en torno al «artículo Odebrecht» insitado por el partido Cambiemos para hacer retroactiva la aplicación de la ley mediante «acuerdos administrativos» y obtener confesiones de empresarios arrepentidos en dicha polémica que se originó en Brasil y pagos declarados de coimas a funcionarios argentinos en la era K.
No sólo no prosperó el “artículo Odebrecht”, en debates muy teñidos por la campaña electoral por entonces en ciernes. El Senado fue muy crítico de la media sanción en Diputados y terminó aprobando un texto con grandes modificaciones, al que ahora no se le tocaría nada, con el objetivo de que haya ley.
En la Cámara se limitó el objeto de la Responsabilidad Penal Empresario a tan solo cinco crímenes: cohecho y tráfico de influencias, nacional o transnacional; negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas; concusión (exenciones ilegales); enriquecimiento ilícito de funcionarios y empleados; y balances e informes falsos agravados.
De igual forma, se eliminó de un solo tiro la «imprescriptibilidad de los delitos de corrupción», que el massismo pudo insertar, con demasiada polémica sobre su equiparación con los delitos de lesa humanidad (que son imprescriptibles).
Las comisiones de Legislación Penal y de Legislación General que darían dictamen mañana, están presididas por la radical Gabriela Burgos, y el macrista Daniel Lipovetzky.