El presidente Mauricio Macri encabezó una reunión de Gabinete ampliado en el Centro Cultural Kirchner. Así, junto con la gobernadora María Eugenia Vidal y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, arengó a su tropa de funcionarios de Juntos por el Cambio a seguir trabajando para mejorar en las elecciones generales de octubre, después de una derrota en las PASO.
En ese marco, Macri, Vidal y Larreta fueron las principales figuras arriba del escenario y realizaron una autocrítica y una catarsis de su gestión, que recibió el revés electoral del pasado domingo.
Asimismo, el propósito fue levantar el ánimo de los funcionarios y asesores, y motivarlos a seguir trabajando, aun cuando el Frente para Todos se llevara la gran mayoría de los votos.
Si bien Juntos por el Cambio anticipó a una derrota, no esperaban que la diferencia se presentara tan insalvable como ocurrió en estas primarias.
Vea también: Sergio Massa arremetió contra Mauricio Macri
Encuentro de Mauricio Macri con figuras de Cambiemos contó con fuerte operativo de seguridad
En este encuentro de figuras de Cambiemos, así como la presencia del Presidente, la gobernadora y el jefe de Gobierno porteño, volvió preciso el despliegue de un importante operativo de seguridad para proteger el recinto.
En ese sentido, los vecinos de San Nicolás vieron con asombro cómo, durante la madrugada, se hacían presentes en las inmediaciones del edificio, ubicado entre Leandro Alem y Corrientes, varios micros y camionetas de Prefectura y de Gendarmería.
Por otra parte, Macri le habló a sus electores, tal vez intentando hacer lo mismo que con sus funcionarios. Después de la derrota y de la nefasta conferencia de prensa del lunes, el Presidente emitió, el pasado, un breve mensaje en donde se disculpó por su reacción y anunció una serie de medidas económicas.
Estas tienen como objetivo afrontar la crisis que generó la reacción de los mercados al resultado de las PASO. Además, se acercó al candidato ganador, Alberto Fernández, y mantuvo una buena y larga conversación por teléfono.
Ello evidencia la intención de tranquilizar a los mercados, demostrando que, en caso de que sea necesaria, la transición de gobierno sería ordenada. Mientras tanto, el dólar se disparaba hasta lo $63, se derrumbaban los bonos y las acciones argentinas y el riesgo país aumentaba hasta casi llegar a los 200 puntos.