El popular trío argentino, Soda Stereo, ofreció su último concierto un día como hoy, hace exactamente una veintena en el estadio de River Plate, sitio donde no cabía un alma y desde el cual repasaron exitosos temas de todas sus facetas como agrupación, junto con artistas que de una manera u otra habían sido partícipes de su legendaria historia musical.
Aquel “Gracias… Totales”, fue simple pero muy contundente, convirtiéndose después en un momento icónico de una banda, que fue de suma importancia en la escena del rock latinoamericano, que empezaba a hacerse sentir con mayor fuerza lejos de sus fronteras.
Al guitarrista y voz líder, Gustavo Cerati, lo acompañó el bajista Zeta Bosio y el baterista Charly Alberti, quienes tocaron más de veinte canciones para su público, cerrando así una estupenda era marcada por la composición de nueve discos, que los posicionó como uno de los más grandes grupos de las décadas del 80 y 90, sin discusión.
El show de aquella vez, comenzó con la canción “En la ciudad de la furia”, alternando con los temas “Juegos de Seducción”, “Cuando Pase El Temblor”, “Sobredosis de TV”, “Corazón Delator”, “Signos”, “Lo Que Sangra”, “Persiana Americana”, “Trátame Suavemente”, “Té Para Tres”, “Canción Animal”, entre otros, cerrando con “De Música Ligera” un show sublime que contó con Fabián González en los teclados, Andrea Álvarez, Richard Coleman, Fabián “El Zorrito” Quintiero, Daniel Sais, más los arreglos de Alejandro Terán y Axel Krygier.
La gira de despedida se paseó por varios escenarios del continente suramericano como Chile, Venezuela y México. Para quienes formaron parte de su producción, expresaron que ese tour en particular fue muy tenso para Soda Stereo, pues en aquel momento Cerati ya pensaba irse por su cuenta, y esa “estructura” como banda no era lo que quería en su futuro.
Después llegaría la inminente separación, que le brindó a Cerati la oportunidad de desarrollar una fructífera carrera en solitario, mientras que el resto de los integrantes de Soda Stereo, tomó su propio camino: Zeta apoyando diversas bandas alternativas hasta la fecha, y Charly Alberti dedicado a tópicos relacionados con la tecnología y la ecología.
Regresarían en el año 2007 al estadio River Plate, pero ya no era lo mismo. La gira “Me Verás Volver” fue una de las más esperadas y aclamadas, pero sólo se transformó en un breve sueño, pues al completarse los conciertos programados, cada cual volvió a su rutina, derrumbándose rápidamente el ideal de ver a Soda Stereo reunida y perdurable en la historia, como lo que siempre fue: Un fenómeno musical y cultural que excedió a ellos mismos.