Teniendo en cuenta la meta de aumentar la producción reduciendo los costos y maximizando la eficacia de los procesos, es necesario apostar por nuevos métodos que ayuden a conseguir estos objetivos de la manera más práctica posible. El lean manufacturing es una metodología que ayuda a las organizaciones a conseguir esto incluyendo en el análisis factores como los tiempos y los nuevos recursos.
El lean manufacturing se abre como una nueva opción entre miles de nuevas metodologías. Se trata de una manera revolucionaria de cambiar los procesos de las organizaciones de forma que siempre sean positivos. Esta estrategia apunta a la organización y estandarización de los procesos basándose siempre en el mismo pilar: Lo que no agrega valor, debe eliminarse.
Pero ¿Cómo saber que debe eliminarse? Mediante un exhaustivo análisis se detectarán todas aquellas actividades involucradas en los procesos de la organización que no tienen una funcionalidad concreta. Así, se intentará eliminar:
- Cuellos de botella
- Tiempos muertos
- Sobreproducción
- Movimientos innecesarios
- Reprocesos
- Inventarios que superan lo necesario
- Procesos fallidos
- Baja calidad de los productos o servicios
Para lograr contrarrestar estas malas prácticas que llevan a las organizaciones a la falta de éxito, se utilizan técnicas incluidas dentro del lean manufacturing. Estas técnicas son diversas, sin embargo, las más comunes son:
- La producción bajo demanda basada en el criterio Pull.
- La mejora continua o método Kaizen
- Las metodologías de prevención como el Poka Yoke
Poner en práctica el lean manufacturing implica saber evaluar cuales son los procesos que están funcionando en contra de estos principios, de modo que puedan ser modificados o, en todo caso, eliminados. Son aquellas actividades que consumen más de lo necesario, nos obligan a gastar más recursos de lo que deberíamos.
A pesar de que el lean manufacturing se ha puesto en práctica en miles de organizaciones desde el siglo pasado, la realidad es que, el auge de esta metodología tan exigente comenzó cuando se hicieron presentes las industrias 4.0, aquella que respalda factores como la limpieza, la sostenibilidad y la utilización de recursos innovadores como las nuevas tecnologías.
¿Cómo se qué beneficios traerá el lean manufacturing a mi empresa?
Como toda metodología, el lean manufacturing cuenta con sus propias ventajas. De hecho, muchas empresas ya han comprobado que esta metodología es la correcta para ellas.
- Un cliente satisfecho: Aunque parezca algo muy simple y poco original, no todas las metodologías tienen tan en cuenta al cliente como lo hace el lean manufacturing. Esta metodología concede gran valor al consumidor satisfecho, ya que, si él cumplió con su necesidad, volverá o, en todo caso, no será un inconveniente que haya que solucionar más tarde.
- El flujo del valor: Es fundamental que una empresa cuente con un flujo productivo y procedimental que haga que el producto o servicio llegue al cliente tal como lo solicitó. De esta manera se elimina la posibilidad de tener que volver a hacerlo o de perder un potencial cliente fiel.
- Flujo continuo: Propone la producción escalonada y especializada. De esta manera se aplican principios del fordismo que pueden ser adaptables a cualquier industria.
- Perfección: el valor de la perfección siempre se toma en cuenta a la hora de implementar el lean manufacturing. Esto se debe a que el pilar de la perfección propone que cada parte del proceso tenga una resultado de producción libre de residuos y sin fallas para no volver a repetirlo y tener que perder recursos.
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